¿JAQUE? ¿MATE?

Escribo estas letras a alguien que quizás no las merezca.
La vida no es un juego, o quizás sí. Quizás es ese juego en el que cuando mueves ficha no hay vuelta atrás. Hiciste jaque a la persona equivocada, y ni a mí ni a los míos nadie les falta a su verdad que al fin y al cabo es la mía. Y yo, en mi cruzada por la verdad, defenderé su verdad y la de los míos.
¿Sabeis esas personas que con lagrimitas de cocodrilo lo arreglan todo? Seguro, todos conocemos a alguien así. Son personas que han estado toda su vida sometid@s a mimos y que cuando el “juego de la vida” empieza a jugar (valga la redundancia) y no tienen esos mimos ya, no saben jugar, y cómo los gat@s atrapados arañan todo a su paso.
Al igual que cualquier juego, éste tiene unas reglas preestablecidas que aceptas, o aceptas:
1. Di siempre la verdad, porque la verdad sólo tiene un camino, y es al final de ese camino dónde se descubre la autentica verdad.
2. Rodéate de los que te vieron crecer, nadie como ellos saben como eres.
3. Haz oídos sordos a las malas lenguas, sí, a esas viperinas.
4. Déjales el camino libre a l@s trepas, caerán por su propio peso.
A mí la vida me dio un golpe duro, de esos inesperados y de los que aunque cicatricen la herida, jamás te recuperas. Cuando tenía 15 años, mi padre murió. Yo aún era un crio, pero ese movimiento en falso de la vida, me hizo madurar. Y comprendí lo que mi padre fue en todos los que le conocieron. El mayor de los legados que me dio fue el de decir siempre la verdad.
No conviene nunca sacar conclusiones de lo que te cuentan, si eso no lo ves por tus propios ojos.
Yo he errado, y por ello pido perdón a los que pude hacer daño, me comieron una ficha, pero aprendí todo lo necesario para que no me vuelva a pasar.
A veces me dá coraje no equivocarme nunca con lo que digo que va a pasar, y que no me engañe casi nunca mi intuición con respecto a las personas.
Por una vez creí que me equivoqué, pero el tiempo, como siempre sabio, me ha dado la razón.
“Golpes bajos”, los movimientos que distes tú con respecto a los demás, y te repito lo que te dije: “recapacita porqué la gente piensa así de ti”.
Me da muchísima pena de que sea mi musa la que a veces le hace caso y escucha sus consejos, y que se deje llevar por palabrería y penurias, me da pena porqué ella es, ya lo sabéis, es un cielo y no merece que la encasillen en tu “grupito”.
Y ahora digo, que la verdad siempre vence a la mentira, y que las personas honestas y que van siempre de frente vencen a las falsas…
Para quién se sienta aludid@ vaya por delante que siempre digo la verdad, y que NUNCA, y repito, NUNCA ME EQUIVOCO.
P.D.: TE equivocaste de rival en esta partida. Porque yo tengo de aliada a la verdad. Y que sepas que por l@s míos, doy mi vida, y la daré. ¿qué tienes tú de aliado?...RECAPACITA