16 dic 2009

A la persona que me tiende la mano sin condiciones...


Tiros de fuego cruzado en esta escaramuza en la que nos metimos, en la que me acompañas.
A ti, a la persona sobre la que su hombro lloré, la que me consuela, comprende, entiende y aprecia. A ti, dulce rosa que alguien se empeñó en marchitar. Hoy no escriben mis letras regueros de tinta añorando los brazos de alguien que adolece de ganas de vivir. Hoy mis letras te las dedico a ti. Porqué estás conmigo en cada guerra, cada negociación y tregua de la vida, porque en los días tristes sabes cómo hacerlo para verme sonreír. No sé, lo que la vida me dará, quitará o robará, pero prometo por mi sangre que a ti no te voy a perder.
“sin rumbo”, siempre voy, lo sabes, me conoces a la perfección mejor que mi madre, pero sabes cómo hacerlo para que todo se vaya. No te enfades con mi persona si alguna vez no sigo el camino que me guían tus sabias palabras, sabes lo que soy, lo que he sido, y sabes mejor que nadie lo que seré.
Que esta vida, llena de problemas, es muy puta, y por sí sola nos intenta hundir. Quizás suene efímero decirlo con palabras, pero creo que con mirarme sabes lo que siento, ya me conoces. Aquí estoy, estaré para apartar las nubes de cualquier día gris, para que el sol inunde tu cuerpo de alegría, estaré cuando te duela la vida para llorar junto a ti, estaré cuando te pierdas y no sepas dónde ir, ahí estaré para indicarte qué camino es el mejor coger. Estaré los días más felices que tendrás y que te quedan por venir, estaré siendo tu ángel de la guardia, estaré para permitirte caer, levantarte y decirte a ti, cómo tantas veces tú a mí: “ya te lo dije”. Estaré porque el día que te conocí firmé con sangre el pacto que jamás pienso romper, estaré para defenderte, cuidarte, estaré porqué tú has estado y porqué los grandes amigos no se les llama cuando estás mal, porque si miras a tu lado siempre están. Porqué hay caminos en los que nos perdemos, momentos en los que las almas oscuras no quieren arrastrar hasta un infinito que nadie conoce su final, y tú, siempre me tendiste la mano para no caer en la mentira, el desprecio y la FALSERÍA de los demás, me enseñaste a decir siempre mi verdad, por eso te tengo este cariño que nadie borrará.
No sé cómo expresar esto, que me guíe dónde me guíe la vida, sé que te tendré para bajarme de las nubes, o para recordarme quién soy, sé que estarás porqué puedo contar contigo. Hormiga

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