Pitas, pitas, pitas...

Las gallinas de corral de las de antaño.

Primero, tengo claro y lo digo a mucho orgullo que soy andaluz.

Blas Infante, padre de la autonomía andaluza, sólo por eso, merece todo el respeto del mundo político, alguien que luchó por un sueño, que a día de  hoy es una realidad. Por el simple hecho de ser un humano no merece que se le falte a su memoria diciéndole que era un cretino porqué los dirigentes del PP no puedan ahora mismo manejar a los obreros como lo hacían los “señoritos”, eso se lo debemos a él.

No voy a consentir que nuestro acento sea objeto de burla por parte de nadie, y menos por parte de los del PP que parece, según el innombrable (Aznar) borracho, que son los que no saben hablar, ni siquiera tener acento. Fijaos si tenemos riqueza los de Andalucía lingüísticamente que hablando como ellos dicen, “malamente”, escribimos un perfecto castellano. A día de hoy y muchos que leéis lo sabéis, nadie me ha dicho que no me entiende, y nuestro acento, para mí es el mejor. Pero bueno parece ser que el señor Arenas habla el mejor castellano del mundo y no sabe ni dónde cojones está puesto en pie.

A la lideresa retrograda y caciquil, que la gallina que  cloquea es ella, que se tiene muy bien aprendido eso de comer  “cati”, el pienso para las gallinas. En Andalucía no somos animales, aunque ella lo piense así. Y está calificando de sin vergüenzas a la mayoría que, DEMOCRÁTICAMENTE, eligió a sus representantes políticos, y por suerte no al PP. Pero parece que  tiene poca memoria ésta señora, si se le puede llamar algo,  porqué en Andalucía aún en tiempos del dictador y asesino, aún siendo ultrajados y explotados por un mísero trozo de pan, aún estando condenados a el analfabetismo, aún así, éramos cultos, preparados y luchadores, por eso hoy estamos dónde estamos. Aquí la única gallina es usted, y se parece a las que tenía mi hermano en la finca con los caballos,  que tenían el cuello desplumado, así es usted. La deuda histórica es la que no se zanjó cuando gobernaba el innombrable y tenía de ministro al recórd man de perder elecciones (Arenas), ha tenido que llegar un presidente del PSOE para que se nos reconozca lo que nos pertenece por historia, aquí no queremos nada que no nos pertenezca.

Andalucía es mi tierra, tierra de historia, de luchadores y luchadoras, de gente trabajadora, de arte, cultura y duende. Es tierra de emprendedores e innovadores, tierra  progresista y de izquierda, de gente inteligente.  Andalucía es un trozo de cielo aquí en la tierra, tenemos de todo, sierra, valles, mar, montañas, LUZ, playas, nieve…Somos pioneros en investigación biomédica, y en el desarrollo de tecnologías sostenibles. No consiento que se nos llame subvencionados, sin vergüenzas, tartajosos ni que estamos todo el día de fiesta… Somos trabajadores, que hemos sabido luchar por lo que es nuestro, incluso aprendiendo matemáticas con un tizón en una piedra, porqué los señoritos de antes nos engañaban. Somos gente con más vergüenza que quién nos tacha de no tenerla, porqué Sra. Aguirre, le recuerdo que somos libres. Y hablamos como hemos aprendido, que no hay nada más hermoso que hablar la lengua de tu tierra, y escribir un perfecto castellano. Aquí no nos llevamos todo el día de fiesta, aquí disfrutamos los ratos que tenemos libre para despejarnos de algo que ella no sabe que es, del tajo.

Y tenemos “tó er arte der mundo” para decirle que se coma el pienso que no queremos aquí, así, insultando a  un pueblo tan honesto, sabio y luchador como el andaluz, así es como quieren ganar las elecciones…

Solamente verdades...es mi soledad...

Está la luna rizándome el pelo, jugando con el brillo de mis ojos, mientras descanso en el lecho de arena de tu cuerpo. Juega la luna, esa que tienes prisionera de tu mirada, dibujando siluetas de su brillo en las sombras de nuestros cuerpos.  Me bebo los mares que descansan en tu mirada, mi niña marinera, que quiero morir en tu pecho para vivir la vida eterna de nuevo a tu lado, que quiero coronarte con estrellas reflejadas en nuestro mar.

Quiero descansar en tu playa, que es la mía, quiero que la arena sea quién escriba nuestra historia a partir de ahora, que dibujen el infinito paisaje de nuestros cuerpos luchando por resistir. Ahora voy a ser todo aquello que odié, seré ladrón para robarte sonrisas en días de eterna tristeza. Me arrodillaré ante ti. Mentiré si con cada una de mis mentiras me amas más. Cambiaré si con ello tú no cambias. Temeré la ira de tu Dios. Claudicaré en mi reino de sueños por ti.  Amor mío tienes aquí para ti una historia sin final, sin final escrito para que tú y yo lo escribamos con nuestra verdad, y seamos un continuo continuará…

Porqué tu amor me cautiva y desata, me enloquece y me llena de cordura,  porqué llenas de oscuridad y de luz todo lo que necesito, me llenas de tranquilidad y desosiego cuando no te tengo, porqué no hay nada más puro en este mundo que nuestro amor,  porqué le das las vueltas a mi reloj y paras sus manecillas cuando las necesito parar y aunque sea esclavo de tu amor, no quiero cambiarlo tampoco por mi libertad, y sí a tu lado muero de amor quiero llevarte al cielo, para matarnos a besos…

Eres un mundo, eres el paraíso sin conquistar, eres la barca del marinero, la sombra fresca del valle cuando tengo calor, eres el fuego cuando tengo frío, eres la playa desierta dónde me gusta naufragar para que me rescates, eres mi patria y bandera…

Y si tengo que morir de amor a tu lado, moriré y no me valdrá de nada la otra vida, porqué iré al infierno por beber del pecado original de tus besos y moriré cada noche en tus manos…y a pesar de todo esto tengo que decirte una cosa…

TE QUIERO 

De rodillas...

Otra  nochecita paseando por las arenas de esta playa, otra noche de bohemia junto a ti, otro pase de pecho a la luna, otra pirueta con salto mortal entre las estrellitas, otro comienzo de tu mano agarrado, más fuerte y más puro es ahora tu corazón.

Deja que hablen, deja que nos critiquen,  deja que nos maten con cuchillos por la espalda, deja que nos miren, que mientras no me sueltes la mano a mí no me hace falta ningún mes de mayo, ningún  rayito de luna mientras no sea reflejado en tu mirada mientras me miras, no quiero bañarme si no es en la profundidad de mar, no quiero perderme si no es en la oscuridad de tus ojos negros…

Juegan las estrellas mientras mis dedos componen melodías en tu pelo, y ahora puedo jurar que cada una de mis letras van por ti, y si alguna vez escuchas que mis letras a otras tantas entregué,  tú sólo mírame antes de besarme y saca tu veredicto, que pienso cumplir íntegra toda mi condena amarradito siempre a tu cintura. Pero si millones de letras entregué, mirándote te digo que en infinitas letras te definiré, y ahora bésame que calle nuestras palabras y hablen nuestros corazones.  Eso que te contarán es simplemente una leyenda de amor que me empeñe en idealizar.

Ahora de rodillas en la puerta de  toriles, sin capote ni muleta, con mi chaquetilla abierta espero que me vengas a buscar  para  hacer conmigo lo que nos quedó aquél día por hacer, ahora no voy a tener miedo a mirarte y decirte te quiero sin salir corriendo,  ahora hondearé la más pura de las banderas, que es la tuya.

Comprendo que nos lleve la ilusión a ese mundo idealizado de caricias, besos y abrazos, comprendo que me mires y el silencio grite entre nosotros dos porqué no tengamos nada que decirnos, que no se pueda decir con un beso, comprendo que me aprietes la mano y sigamos caminando, comprendo abraces y aprietes tanto que me falte el aire…comprendo ahora todo aquello que un día olvidé y no comprendía.

Y como todo cambia en la vida de un día para otros, ahora voy a mirar un poco atrás y rescatar todo aquello que aprendí, para estando contigo no fallarte nunca, porqué sin ti, ya lo sabes “soy ese crío perdido que no sabe dónde ir”, por qué es en tu pecho dónde me encanta descansar…

Se lo debía a alguien...

Hoy vengo a escribirte a ti. A ti porqué cuando todo es tan oscuro, cuando no hay nada más para seguir, cuando el dolor se ciñe en mi sien, cuando la hipocresía vence a la realidad, cuando todo está tan perdido…apareces con la luna lunera para que me alumbre, apareces para entregarme tu reino,  apareces sin que nada importe, apareces dándome tu mano, tu sonrisa, tus palabras y tu abrazo  más sincero que me llena de todo eso que me vaciaron un día.

Hoy como a veces te vuelvo a escribir, porque si mil batallas describí con mis letras, siempre tú estuviste  a mi lado, siempre compañera, siempre robando el sol para alumbrarme en mi oscuridad, siempre dándome eso que me faltaba, ese aliento para mirar a “cualquier otra parte”, siempre empuñando tu espada de lealtad, respeto y fidelidad, siempre a mi espalda, siempre conmigo a dónde nos lleve la vida. 

Quizás algún día me marche y no pueda decirte cuanto te quiero, cuanto te añoro cuando duele la vida…si algún día me fuera y no me diera tiempo a despedirme, aquí lo tienes, todo aquello que no te dije. Escucha una vez más mis consejos que tantas veces escuchaste…

Cómete la vida, lucha por tus ideas, lucha por que nadie te robe la sonrisa, lucha por tus ideales, lucha por mí y por ti. Lucha, aunque la batalla sea larga y dura, aunque haya batallas que tengas que perder, aunque veas la guerra perdida, aunque todo a tú alrededor se nuble. Lucha, porque aunque el sol se junte con la tierra, yo estaré detrás de ti para darte el aliento que te haga seguir.

Gracias, gracias de la forma más sencilla, más hermosa y verdadera. Gracias por qué me enseñaste en tu bola de cristal lo que es la vida de verdad, porque me elegiste a mí para tenderme tu mano, gracias por enseñarme la vida de frente, gracias por ser simplemente como eres.

Ahora que la vida duele, ahora que las ostias duelen de verdad, ahora que en boca de todos y todas estoy por dar más de lo que tenía, ahora que sería más fácil atacarme que defenderme, ahora sigue aquí.  Ahora que la vida no quiere verme de pie, me levantas. Ahora que las guerras son de verdad, ahora que me enseñaron a caerme y volverme a levantar, ahora que en el suelo me pisotean, ahora sigues aquí y te llenas de barro conmigo si hace falta para verme sonreír.

Ahora que luché por mi verdad, ahora que dije todo lo que tenía que decir,  ahora que fui pintor, poeta, bohemio y soñador, ahora que perdí la guerra por lo creía…miro hacia atrás y veo mi  sangre derramada,  ahora vuelvo a creer en nuestra revolución, ahora vuelvo a creer en la lucha por la verdad.  De tu mano aprendí  que el amor es más que una simple mirada, que la luna no es posesión de nadie, que mi vida es mía, aprendí que luchar consiste en levantarse cada día, que la guerra es la búsqueda de la verdad, que la vida es mucho más que ver el sol. Ahora cuando caigas, seré tu cirineo, seré tu costalero en eterna promesa…

Si hiciera falta, a ese tu dios, me arrodillaría, para pedirle que nunca jamás me faltases en mi vida… Tienes un contrato en mi vida, nunca me faltes, que quiero que me enseñes como es la vida, la vida de verdad. Aceptaría tu corona de espinas para no verte sufrir y sufriría los azotes que te quisieran dar para no verte sufrir a ti.

Ahora quiero que me enseñes que es la LIBERTAD…

Cántame...

Vuelan letras en mi mente, configurando el peor de  los paisajes hostiles que pudiera darse. Una guerra,  un desierto desolado, restos de una batalla, charcos de sangre inundando el suelo dónde se refleja mi cara, espesa niebla entre los árboles de final del camino, olor a adiós.

Encadenado a esa sonrisa de la que un día fui prisionero, condenado a luchar por algo tan efímero como mi soledad cuando tú estás, y encima ahora se pone a llover y no tengo paragüas.

Allí con mi mirada perdida en el horizonte de tus labios, aferrado al atisbo de ilusión que me quedaba, sin pensar ya en ti, en tus miradas letales, en tus sonrisas perdidas de cada atardecer. Recorría las gotas de lluvia mi cara, dejando tras de sí, el rastro de otra guerra sin final. Retales de mi andrajosa ropa bailaban al compás del viento,  y caí en el suelo, imaginando el silencio que se apoderaba del final.

Allí con mis rodillas en el suelo, sintiendo el frío del negro atardecer,  pensando en todo lo que di sin que lo merecieras, de todos  y cada uno de los besos que hicieron de soldados, de cada una de las letras que hicieron de escudo en mitad de la lluvia de flechas,  de cada batallón de caricias que perecieron sin sentido alguno en esta guerra. Este era el final de la historia, no tenía más aliados ya para luchar en una guerra que desde su principio, tenía escrito su final.

Seguí allí en el suelo,  y la luna ganó su habitual batalla al sol, nada que decir…nada que no seas tú…

Y apareció de nuevo la luz, de nuevo esa ilusión, esa tempestad llena de calma, esa mirada que me colapsa mi sangre, esa calada de aire fresco que borra el aire viciado de un amor con restos de otro amor fracasado,  otro susurro, otra caricia que recorre mi cara,  otra espada de amor acuñada con versos, esta vez, sin dolor…Otra batalla, pero en misión de paz, otra vez, otro aliado en busca de la verdad…

Ahora que sobre la muerte bailé, ahora que todo lo que tenía perdí, ahora otra vez… apareces, y siento que jamás te marchaste de aquí, porqué entre tanta violencia de amor, siempre fuiste  la bandera blanca de paz, siempre trinchera de mi soledad, siempre luz y calor en medio del frío y la oscuridad, dulce canto de ruiseñor…siempre el amanecer de un nuevo día y el perpetuo atardecer en primavera, siempre  fuiste la paz y no la guerra, siempre estuviste conmigo… y ahora lucharé por conquistar la más deseada de las fortalezas, tu corazón.

Me levanté y grite al cielo que por ti moriría otra vez sin temor, esta vez sin miedo a perder, esta vez sabiendo que tú estás detrás,  esta vez, porque sé que voy a ganar.

Y ahora cállate, que el silencio se apodere de los dos, cómeme la boca y empecemos lo que nunca debió de terminar… luchemos por ti y por mí, luchemos por un mundo para los dos…

Mas allá del bien y del mal...

¿lo ves?...No podemos vivir el uno sin el otro, tiempo alejado de tu campo de batalla, lejos de la tempestad de tu sonrisa y la fuerza de tu mirada. Tan lejos de todo lo que un día dije que no me alejaría, tan perdido allí dónde nadie se vuelve a encontrar. En un territorio desierto sin tus manos que un día me acariciaron, en la más obsesa oscuridad sin ti.
Otra vez, aquí tu y yo, mirándonos sin saber que decir, sin saber que escusa ponernos para volver a empezar, si tirarnos los trastos del pasado a la cabeza o que nos dé por alcanzar el cielo de nuevo.
Volvemos a cruzar nuestras vidas, volvemos a cuidarnos otra vez, a correr por las calles mojadas buscando el refugio de cualquier portal. A tendernos la mano sin mirar atrás, a ayudarnos sin pedir nada más que una simple sonrisa.
¿Sabes por qué te hago sonreír ?...Porqué cuando sonríes hace que se me olvide aquel lugar al que no me debería haber ido, porqué me recuerda las noches en las que la “luna tejía su manto con estrellitas doradas”, sé que me fui sin darte ni una explicación a esto que nunca debió suceder. Porque cuando sonríes no hay nada más, y eso es maravilloso, no sabes cuánto.
No hace falta que te pida perdón, porque sé que estoy más que perdonado, si de algo vale te diré que te recordé todo el tiempo, ahora quiero volver a darte cada uno de mis instantes, y no pienso mentirte nunca más, porque no voy a olvidarte nunca más. 

Que decirte de todo este tiempo…¿quieres sabes dónde he estado?, creí estar en el cielo, pero no me acordaba que lo tenías en tu mirada, creí saber que camino coger y decir siempre la verdad, pero el camino se hace de tu mano, que es más fácil y bonito, y la verdad, eres tú.
Prometo no volver a sacarte de mi mente, prometo volver a empezar de nuevo, y mejor que antes, mucho más fuerte y consciente de darte cada uno de mis instantes para ti. Prometo que te haré sonreír cada día de tu vida, y buscaré por todas partes para decirte en la simpleza de dos palabras, algo tan grande como este TE QUIERO.
Más allá del bien y del mal, prometo no olvidarte nunca más…

Soy Socialista, y a mucho orgullo

Los socialistas no se hacen, nacen y se siembran.  Soy socialista porqué mi conciencia me lo dicta, mi conciencia me dicta mirar siempre al futuro, sin olvidarme nunca del pasado. Me dicta ayudar a los más necesitados, me dicta ser idealista y solidario. Me dicta ser honrado, y preocuparme de los demás, antes incluso que de mí. Me dicta luchar por las injusticias, por la democracia, la tolerancia, la igualdad y el respeto. Ser socialista es ser algo más que una corriente ideológica, es una forma de ver la vida, vivirla y ser partícipe de ella.

Eso de que los socialistas se siembran, llevan razón… Si en mi casa no se hubiese hablado de política desde que yo era pequeño, quizás hoy no me hubiese gustado tanto esto de la política.

Recuerdo, o mejor dicho, me recuerdan un día, un mitin de D. Alfonso Guerra en el polideportivo Andrés Estrada, tenía  año y medio cerca de dos. Dice mi madre que había un concierto y que por eso me llevó. Recuerda mi mente, muy vagamente el polideportivo a rebosar. Mi madre me sostenía en brazos y yo me entretenía con una bandera del PSOE, agitándola y diciendo “recre…recre…”. Dice mi madre que en una parte del discurso de Alfonso Guerra me señaló y dijo: “Ese es el futuro”. Y ahora sé que no se equivocaba. Vienen recuerdos a mi mente algunos otros actos esta vez con Felipe González quiero recordar, en el Parque Alonso Sánchez de Huelva, y así podría llevarme nombrando mítines mucho tiempo.

Esto era sólo un ejemplo para deciros eso, que en mi casa la política siempre ha estado encima de la mesa.

No pienso consentir que unos pocos sean quienes tiren por tierra la libertad que consiguieron los de la generación anterior a la nuestra, esa lucha por ser únicamente libres e iguales, y que por luchar por eso, muchos y muchas de ellos hoy no están entre nosotros.  Se cumplieron ayer 30 años de la Autonomía andaluza, 30 años de progreso, libertad e igualdad, 30 años de cambios, de los cuales el PSOE siempre ha estado detrás de ese progreso. 30 años en los Andalucía ha pasado de ser la última comunidad de España a una de las pioneras tanto en sanidad como en I+D+I. Una comunidad fuerte, unida y orgullosa de ello.

30 años de millones de historias, 30 años de los que lucharon por lo que hoy tenemos. Llega el momento del cambio, llega el momento de mi generación, de esa que dicen que no estamos preparados, pero os aseguro que daremos la cara por luchar 30 años más por el futuro de nuestra tierra. Toca el relevo generacional, ese que parece que nunca iba a llegar, y es ahora más que nunca cuando tenemos que sentirnos orgullosos de ser socialistas, de salir a calle y demostrarles a los retrógrados que hay siempre que mirar al futuro siendo optimista, el momento otra vez de luchar por los valores que nos unen, de luchar por todo aquello que pensamos y que dentro de 30 años, quizás alguien recuerde, y si no es así, allí estaremos nosotros para recordar lo que hicimos en nuestra generación y lo que hicieron la anterior a la nuestra.

Hace poco me dijeron que defendía “mis intereses” por encima de todo. Y sabes que le digo yo a ese fantasma sin identidad: Defiendo mis intereses, claro que sí, defiendo la libertad, la igualdad entre hombres y mujeres. Defiendo el progreso y la solidaridad, defiendo un sistema económico no basado en el pelotazo, defiendo la alegría, defiendo cientos de miles de personas que dejaron su vida por lo que hoy tenemos y disfrutamos, defiendo a mi partido que es el PSOE, porque detrás de los millones de votantes, hay una historia similar a la mía, una vida con problemas y alegrías. Soy socialista porque mi madre me parió así, y porque la semilla del socialismo fue germinada durante mi infancia, porqué esa maceta ideológica seguirá creciendo más aún con el tiempo, y porque nada ni nadie, ni tan siquiera POR HUELVA, me hará cortar los brotes de esperanzas que se esconden tras estas siglas: PSOE.

El socialismo es una manera de ver la vida… y ahora, ten el valor de dar tu nombre como siempre lo hago yo.